Un alga invasora se instala en la Reserva Marina Ses Negres

El pasado 10 de noviembre se celebró en Begur una jornada de trabajo dedicada a estudiar el impacto del alga invasora Caulerpa cylindracea en la zona. Se trata de un alga de origen australiano, tóxica y muy agresiva, que causa graves impactos ecológicos sobre las comunidades marinas autóctonas. En algunos casos puede llegar a sustituirlas casi por completo y está considerada como una de las 100 especies con más poder invasor del Mediterráneo, según la International Union for Conservation of Nature (UICN).

Maria García, experta en algas del CEAB, fue la encargada de organizar la inmersión de los buzos y de dar una charla informativa sobre Caulerpa. El objetivo de la jornada era acercar el conocimiento de los expertos a las autoridades y a los voluntarios que quieran ayudar a hacer el seguimiento y control de la situación. «Es importante conocer las características de la especie, aprender a identificarla y saber qué implicaciones y efectos tiene sobre los ecosistemas. Se trata de un alga muy difícil de erradicar, casi imposible, pues es capaz de reproducirse tanto sexual como asexualmente; hay que tenerla controlada» dice la investigadora del Centre d’Estudis Avançats de Blanes.

 

No se había encontrado nunca tan al norte

Un grupo de voluntarios de la Asociación Sotaigua, junto con colaboradores y miembros del cuerpo de Agentes Rurales Marinos, encontraron una población del alga invasora el pasado 2 de octubre. El hallazgo se produjo mientras realizaban la limpieza submarina de la Reserva Natural de Ses Negres, en el Cap de Begur (Girona), durante la 2ª Edición de Begur Sotaigua que organiza la Asociación de Comercio y Turismo de Begur. Tanto la Asociación como los Agentes Rurales pusieron en marcha todos los mecanismos pertinentes y poco después hicieron una inmersión con el Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación de la Generalitat, que ya ha confirmado la existencia de Caulerpa en la zona.

En 2008 se detectó por primera vez en Catalunya, en la costa del Garraf, y se extendió hacia tierras tarraconenses y también hacia el norte, pero sin sobrepasar nunca la costa de Blanes. Este es la primera vez que se detecta en las aguas del Baix Empordà.

 

La gran aportación de los Observatorios Centinela

La Asociación Sotaigua forma parte de la red de Observatorios Centinela impulsada este año por la plataforma de ciencia ciudadana Observadores del Mar. La creación de estos observatorios permite a los ciudadanos aportar sus observaciones al mar y colaborar con los investigadores que monitorizan las especies invasoras y otros fenómenos de cambio a lo largo de toda la costa española.

La observación fue validada por expertos del proyecto de algas invasoras de la plataforma de observadores que coordina el Instituto de Ciencias del Mar (ICM-CSIC). Se la ha destacado por su abundancia, por encontrarse en un espacio natural protegido y por haberse establecido por encima de varias gorgonias a las que puede afectar la presencia de esta alga.

Elisabetta Broglio, coordinadora de la plataforma explica: «La colaboración de los Observatorios Centinela como el de Begur con la investigación científica, demuestra la potencialidad que tiene la ciencia ciudadana. A partir de ahora, es muy importante seguir la evolución de esta población para conocer el posible impacto sobre el ecosistema y diseñar estrategias de gestión. »

 

Ver la nota de prensa:

http://www.dicat.csic.es/dicat/es/noticias-2/noticias/574-se-confirma-la-presencia-del-alga-invasora-caulerpa-cylindracea-en-el-baix-emporda