Puede la ciudadanía ayudar a mejorar las predicciones de riesgo de enfermedades transmitidas por mosquitos?

La ciencia ciudadana quiere revolucionar la investigación epidemiológica y mejorar la capacidad de predicción del riesgo de enfermedades infecciosas transmitidas por mosquitos invasores.

La colaboración entre ciencia y ciudadanía mediante las nuevas tecnologías para identificar especies invasoras, es ya un hecho en Europa. Esta nueva forma de hacer ciencia nos ofrece nuevos retos y oportunidades tanto en la mejora de la salud ambiental como en la de la salud pública.

¿Podemos mejorar los modelos y las predicciones epidemiológicas actuales con metodologías de ciencia ciudadana? ¿Como hemos de resolver las dudas que pueden generar la calidad de los datos (precisión o errores), y los sesgos de muestreo intrínsecos a este tipo de datos? Más allá del ámbito de la investigación, ¿son estos datos suficientemente útiles y fiables, para ayudar a la gestión diaria de las problemáticas introducidas por estos mosquitos invasores capaces de transmitir enfermedades infecciosas?

Estas y otras cuestiones son las que se han debatido en el Workshop «Aedes Invasive Mosquitos: Linking Citizen Science to Epidemiological Models», con el objetivo de identificar los retos que genera el vínculo directo entre los programas de recopilación de datos basados ​​en la ciencia ciudadana y los modelos epidemiológicos, haciendo especial énfasis en el desarrollo de mapas de riesgos y de previsión de brotes, tanto a escala regional como Europea.

A lo largo de este Workshop se han tratado los cambios que supone para la investigación, y en particular en la modelización epidemiológica, la incorporación de datos ciudadanos. ¿Qué datos son los datos más importantes que podrían recoger los ciudadanos? ¿Qué usos se les puede dar? ¿Como podemos hacer que los datos sean cada vez más fiables para hacer estudios científicos y modelos predictivos?

En el caso de los mosquitos invasores, esto conlleva establecer nuevos protocolos para la obtención y procesado de esta tipología de datos y poder combinar la vigilancia tradicional con redes masivas de informadores en toda Europa a través de teléfonos móviles.

Esto abre una nueva oportunidad para adquirir datos a gran escala con un nivel de detalle sin precedentes y que, combinadas con estrategias de vigilancia local y otras metodologías, pueden validarse y utilizarse para aumentar nuestro conocimiento sobre mecanismos epidemiológicos complejos y generar mejores predicciones.

Estas ideas innovadoras, representan una revolución tanto en el tiempo de obtención, como en el alcance y la efectividad económica en cuanto a la obtención de datos útiles para la gestión de enfermedades transmitidas por mosquitos. El Big Data entra en el mundo de la epidemiología y del control de la expansión de especies invasoras y vectores de enfermedades a pasos agigantados, de la mano de los ciudadanos y ciudadanas.

Ayer fue el último día de estas jornadas de trabajo, que se han llevado a cabo del 25 al 27 de marzo del 2019, y han estado organizadas en el Centre d’Estudis Avançats de Blanes per Frederic Bartumeus (investigador amfitrión del CEAB), Sander Koenraadt (Universitat de Wageningen, Paises bajos) y Beniamino Caputo (Universitat de Roma La Sapienza, Italia) con ayuda de financiación  Europea (http://www.aedescost.eu/).