Un hombre de Siero (Asturias) envió una foto del mosquito, y los investigadores de Mosquito Alert, una plataforma impulsada por la Obra Social ‘la Caixa’ y coordinada por investigadores del CREAF, el CEAB-CSIC y ICREA, identificaron este insecto de origen asiático, portador de enfermedades como el virus del Nilo Occidental.
Este mosquito se adapta muy fácilmente a ambientes fríos de zonas boscosas, como las del norte de la península ibérica. Muy posiblemente ha llegado a España a través del transporte de neumáticos.
A pesar de ser un transmisor de enfermedades, su presencia no es alarmante para la salud pública, pues la transmisión de los virus suele ser a las aves, alguna vez pasan a caballos, pero muy raramente a humanos.
Los investigadores proponen combatir su propagación tomando las mismas medidas de control que se utilizan para otros mosquitos invasores, como el mosquito tigre. Una de las mejores herramientas que tenemos para evitar su expansión es no dejar agua estancada, que es el lugar de cría ideal para sus larvas.
