El objetivo principal del Proyecto STRESSFISH era proporcionar la base científica para comprender las causas y los efectos del deterioro de la inctiofauna (fauna de peces), actualmente amenazados de extinción, sobre nuestros ríos.
Nuestra hipótesis era que esta disminución es el resultado de interacciones complejas entre varios factores de estrés ambiental impulsados por el cambio global. El proyecto se centró en la alteración hidrológica; la contaminación y su interacción, poco investigadas y que consideramos son de gran interés.
Para abordar este problema, aplicamos conceptos y metodologías innovadores derivados de dos disciplinas científicas diferentes pero complementarias: la ecología de peces y la ecotoxicología. Este enfoque nos permitió establecer relaciones de causa y efecto entre las perturbaciones ambientales y sus efectos en los peces de agua dulce mediante la aplicación de múltiples líneas de evidencia.

En cuanto a los efectos combinados de la minería y la alteración hidrológica, los biomarcadores bioquímicos indicaron que la exposición del barbo (Barbus meridionalis) a la concentración resultante de Zn puede tener efectos nocivos. Además, los efectos medidos a nivel de individuo indicaron que también se inhiben la tasa metabólica y la velocidad crítica de natación. Por otro lado, investigaciones realizadas a nivel de comunidad revelaron que la distribución de los peces continentales ibéricos está relacionada con los rasgos de ciclo vital y la velocidad crítica de natación. Sin embargo, la alteración hidrológica es menos importante que otros factores como la temperatura del agua, el clima, la posición longitudinal a lo largo del eje principal del río o la distancia al mar.

Aplicamos técnicas de monitoreo basadas en efectos “effect-based monitoring” para investigar los efectos recíprocos de la alteración hidrológica y la contaminación química (metales pesados) sobre el barbo (experimento de campo).
1-. El impacto ecológico de las minas abandonadas se vio agravado por la extracción de agua en el sistema de agua receptora: las comunidades naturales estuvieron expuestas a altas concentraciones de Zn como resultado de la acción simultánea de la pérdida de caudal del río y la entrada del efluente minero.
2. La exposición crónica afectó a todos los niveles tróficos: microorganismos, macroinvertebrados y peces. La acumulación de Zn fue muy alta en el biofilm, seguida por los macroinvertebrados y los barbos, causando cambios en la composición de la comunidad microbiana (sustitución de microorganismos típicos de ríos forestados por otros resistentes a metales y parásitos endosimbióticos potencialmente patógenos), disminución de la abundancia y biomasa de macroinvertebrados, principalmente herbívoros; y efectos negativos sobre el estado general (condición) del barbo, de acuerdo con la toxicidad de Zn analizada «in vitro» sobre diferentes tejidos de barbo y la disminución de su capacidad natatoria y las tasas metabólicas medidas en el laboratorio.
3. El experimento confirmó que el barbo puede desempeñar un papel en el ecosistema de gran relevancia en áreas con una carga excesiva de nutrientes ya que evita la acumulación de biomasa en el lecho del río por un efecto barrido. Las situaciones de alta densidad de barbo conducirían a una disminución> 70% en la acumulación de biomasa en el lecho fluvial (biofilm fluvial), una reducción de ~ 60% en la abundancia de macroinvertebrados y cambios en la composición de la comunidad microbiana.
4. Los efectos positivos de la presencia del barbo son menos evidentes en los sitios contaminados. El control sobre la densidad de macroinvertebrados es menos evidente ya que comunidad está más alterada. En relación con el biofilm, a medida que disminuye su grosor, aumenta la concentración de metales y aumenta la presencia de taxones tolerantes a metales.

Analizamos los efectos de la alteración hidrológica, la contaminación y su interacción a escala de cuenca (en el río Ebro). En el eje principal del río, las poblaciones de peces están dominadas en abundancia por especies exóticas invasoras. En contraste, las secciones situadas aguas arriba tienen más especies nativas. Varios factores influyen en este patrón y aunque la alteración hidrológica producida por los embalses favorece la presencia de especies invasoras en el eje principal del río, los factores ambientales naturales como la temperatura son más importantes.