El proyecto PRORISK es una red de formación europea financiada por el programa de investigación e innovación Horizon 2020 de la Unión Europea. PRORISK reúne una red única de científicos con una sólida formación interdisciplinaria en química, biología, medio ambiente y ciencias socioeconómicas. El consorcio está formado por 18 universidades, instituciones de investigación, empresas y organizaciones asociadas de 9 países europeos y también de Canadá.
El Centro de Estudios Avanzados de Blanes (CEAB-CSIC) participa en el proyecto como líder del grupo de trabajo de difusión y divulgación del proyecto. Helena Guasch investigadora principal, junto con otros investigadores del centro, tienen como misión principal la de difundir el conocimiento generado por PRORISK a foros de investigación especializados y los responsables políticos, reguladores y grupos de interés; difundir la estructura de un nuevo foro completo para la investigación interdisciplinaria y la formación en investigación y, proporcionar formación y realizar actividades de divulgación dirigidas a públicos no especializados.
¡Llega el primer boletín!
Para llevar a cabo con éxito algunos de los objetivos de difusión y divulgación, nació a finales del mes de marzo el primer boletín de noticias del proyecto «PRORISK Newsletter» para informar de las novedades, últimas noticias y otras informaciones de interés que se generen en esta red de jóvenes investigadores medioambientales.
Si deseas estar informado de las últimas noticias y novedades puedes consultar la web principal del proyecto.
¿Qué quiere conseguir el proyecto PRORISK?
Esta iniciativa, tiene como objetivo diseñar una plataforma innovadora para capacitar a una red de investigadores en el inicio de su formación «Early Stage Researchers» (ESR) en el campo de la Evaluación de Riesgos Ambientales «Environmental Risk Assessment» (ERA). Se dará a los científicos las herramientas necesarias que les permitirán desarrollar estrategias de protección sostenible de los ecosistemas.
Los jóvenes investigadores ganarán las habilidades para afrontar este gran reto en el cambio de paradigma de la evaluación de riesgos. Trabajarán como futuros expertos en la interfaz entre los conceptos clave de protección sostenible de los ecosistemas y salud. También, podrán abordar datos cada vez más complejas y evaluar críticamente la solidez de las predicciones de riesgo y evaluar los costes socioeconómicos de los daños ambientales.
Todo ello permitirá a los jóvenes investigadores, dar forma a futuras medidas reguladoras que protejan los servicios de los ecosistemas y garanticen así, la sostenibilidad y la prosperidad de estos más allá de la duración del proyecto.
